Conocé la planta invasiva para el cultivo de girasol

octubre 4, 2024

El jopo (Orobanche cumana) es una planta invasiva que parasita las raíces del girasol, afectando su crecimiento y rendimiento. Este organismo, originario de Eurasia, se ha detectado recientemente en América del Sur, específicamente en Santa Cruz, Bolivia. Especialistas del INTA destacan la importancia de implementar medidas preventivas para evitar su propagación.

Impacto en los cultivos de girasol

Fernando Giménez, coordinador del Programa de Cereales y Oleaginosas del INTA, describe al jopo como una “parásita de altísima capacidad invasiva y reproductiva” que puede provocar un gran impacto en los rendimientos de girasol. Una vez que el jopo emerge, lo hace sin hojas ni clorofila, pero con flores y una gran cantidad de semillas altamente reproductivas.

Medidas preventivas necesarias

Sebastián Zuil, especialista en girasol del INTA Reconquista, subraya la urgencia de intensificar las medidas de prevención y vigilancia. Las semillas del jopo son extremadamente pequeñas y pueden trasladarse a otros campos adheridas a semillas o granos de girasol, maquinarias, agua de riego, animales, calzado y por el viento.

Duración de la semilla en el suelo

La semilla del jopo tiene una sorprendente capacidad de sobrevivir en el suelo hasta 20 años. Una vez que invade una parcela, puede condicionar la rotación de cultivos por más de una década, lo que enfatiza la necesidad de prevenir su dispersión.

Recomendaciones para agricultores

Miguel Cantamuto, ex director del INTA Hilario Ascasubi, aconseja a los agricultores estar atentos a cambios en el color, tamaño o salud de las plantas de girasol. También es crucial buscar signos visibles de infestación, como brotes emergentes en la base de los tallos. La inspección de raíces es esencial; se deben seleccionar algunas plantas al azar y buscar nódulos o estructuras parasitarias.

Acciones a seguir ante sospechas

Si se detectan nódulos o hay sospechas de la presencia de Orobanche spp., Yanina Outi, coordinadora de riesgo y vigilancia del SENASA, sugiere completar el formulario provisto por SENASA y notificar al INTA para recibir orientación sobre los pasos a seguir.