El presidente de la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (Cainco), Jean Pierre Antelo, advirtió que las actuales políticas gubernamentales profundizan la crisis económica y ponen en riesgo la productividad, el empleo y la canasta familiar.
Jean Pierre Antelo, presidente de la Cámara de Industria, Comercio, Servicios y Turismo de Santa Cruz (Cainco), cuestionó el modelo económico vigente en Bolivia, al que calificó como “agotado” y responsable directo de la escasez de dólares, la inflación persistente y el deterioro del poder adquisitivo de los bolivianos.
“El Estado ha perdido la capacidad de generar soluciones. Lo que vemos hoy es el colapso de un modelo económico que ya no funciona”, afirmó.
Sostuvo que las medidas adoptadas por el Gobierno —como la intervención en mercados, restricciones a exportaciones y controles de precios— solo buscan responsabilizar al sector privado de una crisis estructural que el propio Estado ha generado.
Para el líder empresarial, la única salida viable a la situación actual es dar paso al dinamismo del sector privado: “La única alternativa económica viable para generar alimentos, productos, productividad y empleo es el sector privado. Pero mientras el Estado lo margina, no habrá condiciones de mejora”, sentenció.
Antelo también alertó sobre los efectos visibles de la crisis en los hogares bolivianos: “La inflación se siente todos los días. El dinero ya no alcanza. El salario pierde valor. Lo que parecía un problema del sector productivo hoy afecta a cada familia boliviana que lucha por llenar su canasta básica”.
En su diagnóstico, el presidente de Cainco advirtió que la inacción del Gobierno, sumada a una agenda política desconectada de los problemas económicos reales, está profundizando la incertidumbre.
“En lugar de enfrentar la crisis de dólares y de combustibles con soluciones estructurales, se recurre a regulaciones arbitrarias que solo crean más cortinas de humo”, dijo.
Para Antelo, las restricciones al sector privado no resolverán los problemas de fondo, y reiteró que Bolivia necesita un cambio urgente de rumbo económico.
“Sin inversión, sin libertad para producir y sin incentivos al empleo, no hay salida posible”, concluyó.
Fuente: El Deber.
Fecha: 06/05/2025.