“Brasil puede ayudar a Bolivia en la transferencia de tecnología, ayudar en la agricultura”, sostuvo el mandatario brasileño, quien pidió a los empresarios y los productores aprovechar los acuerdos pactados entre ambos países para alcanzar el desarrollo de la región.

Según los productores agropecuarios, solo con el uso de las semillas modificadas, para los cultivos de soya, sorgo y maíz, podría coadyuvar en la problemática económica por la que están atravesando los bolivianos.    

Mientras que países como Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay han incorporado la biotecnología en sus cultivos desde hace más de dos décadas, Bolivia aún no ha logrado abrazar esta práctica de manera significativa, pues luego de iniciarse las mesas de trabajo con el Gobierno, se detuvieron en el 2023 y hasta el momento se conoce si, está en los planes de Gobierno su aprobación.

Según el agro, el aplicar esta técnica traería una serie de beneficios:

• Mejoraría la competitividad del país en la exportación de productos agrícolas (a mayor exportación, mayor ingreso de divisas).
• Se podría asegurar altos rendimientos de los granos en época de sequía o de inundaciones, asegurado la producción de alimentos para el mercado interno.
• Bajaría los costos de producción, pues con semillas resistentes a las plagas, se reducirá el uso de químicos para controlar insectos o enfermedades en las plantas.
• A mayor producción de granos, menor precio de los alimentos, pues son productos son productos preponderantes que inciden en la producción de huevo, pollo, carne y leche.
• Se podría aumentar la producción de alimentos en un 30%, en el mismo espacio de siembra.

Por su parte, Miguel Ángel Crespo, vocero de Probioma, explicó que lo que se pide en realidad es el uso de semillas transgénicas.

“Cuando hablan de biotecnología, no quieren decir que en realidad lo que se habla es de introducir transgénicos, que está cuestionado, y además de obsoleta en el mundo, poque no ha dado los resultados esperados en el mundo”, sostuvo Crespo.

El vocero de Probioma, sostuvo que la productividad de los cultivos depende de usar una semilla de alta calidad, sembrar un suelo alto, manejo del cultivo, con la prevención de ataques de plagas y enfermedades que aparecen ante el desmonte de los bosques; y el cuarto requisito es la lluvia, que el clima acompañe con las temporadas de cultivos, sin embargo, esto no es posible, por la deforestación de los bosques”, afirmó.  

“Una semilla no hace milagros”, afirmó el representante de Probioma, quien aseguró que con el uso de semillas transgénicas se incrementa el uso de herbicidas más tóxicos.

Fuente: Red Uno

Sección: Economía 

Fecha: 10/07/2024