Según el informe original, los precios han mostrado una caída generalizada. Esto se refleja en los contratos de las distintas fechas, que han presentado reducciones de algunos centavos por bushel.
Contratos de mayo y julio en descenso
Comenzando con los contratos para mayo, vemos que han caído 4 centavos, cerrando en 1044.75 por bushel. No es un desplome monumental, pero es una señal de alerta para los productores que ya tienen bastante con lo que lidiar. Los contratos de julio tampoco se han librado de la tendencia a la baja, disminuyendo 2.75 centavos para cerrar en 1055.25. Este movimiento podría resonar en el precio final que pagamos por productos que contengan soya.
Otros contratos no escapan de la tendencia
Además de los contratos de mayo y julio, otros también han mostrado ajustes a la baja. Por ejemplo, el contrato de agosto ha visto una reducción de 1.75 centavos, situándose en 1049.50 por bushel. Mientras tanto, los contratos de septiembre y noviembre han seguido la misma ruta descendente, con bajadas de 1.50 y 2.00 centavos respectivamente. Esto sugiere una perspectiva de precios más moderada en los próximos meses.
Volumen y cambios en el interés abierto
Las cifras del volumen de hoy también nos cuentan una historia. El volumen de hoy alcanzó los 35,779, un marcado descenso si lo comparamos con los impresionantes 171,924 del viernes. Sin embargo, el interés abierto, que es un indicativo de la cantidad de contratos que aún no se han liquidado, aumentó en 9,686, lo que podría señalar un interés sostenido en este mercado, pese a los altibajos recientes.
En el contexto de estos movimientos de precios, los comerciantes de futuros y los agricultores tendrán que estar atentos, pues lo que vemos en las cifras puede reflejarse a nivel de precios al consumidor. Así que, mientras planificamos el menú de la semana, no perdamos de vista cómo estas fluctuaciones potencialmente impactan nuestros bolsillos.
Fuente: El Tiempo Latino
Fecha: 06/05/2025
