Con el fin de acercar al pequeño productor a la tecnología agrícola y proporcionar material genético adaptado y de calidad, el gobierno, a través del Instituto Paraguayo de Tecnología Agraria (IPTA), entregó un total de 8.960 plantines de tomate nacional en tres regiones, todos con destino a semilleros. Esto como parte de una estrategia integral para fortalecer la producción de plantines locales y entregar una tecnología 100 % nacional desarrollada por investigadores del IPTA.
En la región sur, específicamente en el departamento de Ñeembucú, se entregaron 640 plantines destinados a la implementación de semilleros, marcando un avance significativo en la producción hortícola del sur del país. En la región noreste, departamento de Canindeyú, se distribuyeron 4.224 plantines para la formación de semilleros, a fin de potenciar las capacidades productivas de los agricultores de esta zona agrícola clave.
En la región norte, en el departamento de Concepción, se entregaron 4.096 plantines a 32 productores de los distritos de Concepción, Horqueta, Arroyito y Paso Horqueta. La comunidad indígena de Paso Barreto también fue incluida como beneficiaria en esta importante iniciativa.
Adicionalmente, el IPTA entregó a principios de este mes un total de 4.224 plantines de tomate tipo perita a pequeños productores de La Colmena, departamento de Paraguarí. Estas nuevas variedades, desarrolladas en el Centro de Investigación Hernando Bertoni (IPTA Caacupé), se destacan por su alto rendimiento, resistencia a enfermedades y adaptabilidad a las condiciones productivas del país.
Estas nuevas variedades, desarrolladas por investigadores paraguayos en el Centro de Investigación Hernando Bertoni (IPTA Caacupé), se destacan por su alto rendimiento, resistencia a enfermedades y adaptabilidad a las condiciones productivas del país. Cada plantín de tomate tipo perita (variedades TMT51 y TMT106) puede llegar a producir hasta 5.000 semillas, de acuerdo al reporte del Instituto Paraguayo de Tecnología Agraria.
IPTA
El instituto, tiene como objetivo principal la generación, rescate, adaptación, validación, difusión y transferencia de la tecnología agraria, y el manejo de los recursos genéticos agropecuarios y forestales, a través del desarrollo de programas de investigación y de tecnologías que permitan elevar la productividad de los productos de origen agropecuario y forestal, a fin de potenciar su competitividad para el mercado interno como el mercado de exportación.
Fuente: La Nación